La tipografía no es solo un “estilo de letra“, es una herramienta psicológica que comunica emociones, personalidad y nivel de profesionalismo en cuestión de segundos.
¿Qué pasa si eliges mal?
- Puede parecer que tu marca está anticuada.
- Puede transmitir inseguridad, poca profesionalidad o falta de claridad
- Incluso puede alejar al público ideal sin que te des cuenta.

¿Y si eliges bien?
– Transmites autoridad o cercanía con solo una palabra.
– El cliente percibe una marca coherente, cuidada y estratégica.
– Conectas emocionalmente, incluso antes de vender.
Ejemplos reales:
✔️ Una tipografía serif transmite elegancia, tradición y confianza.
✔️ Las sans serif modernas evocan innovación, simplicidad y tecnología.
✔️ Letras manuscritas dan calidez, humanidad y cercanía.
✔️ Estilos bold generan impacto y seguridad.
¿Cómo saber cuál es la ideal para ti?
Depende de tu mensaje, tu audiencia y el propósito de tu marca.
No todas las marcas necesitan “verse modernas”… algunas necesitan verse auténticas, creíbles o icónicas.